Podés hacer la cantidad de facturas que necesites.
Escenario 1: tenés dos clientes y mensualmente les facturas por la totalidad de tus servicios, entonces serían dos facturas mensuales por la totalidad.
Escenario 2: tenés trabajos esporádicos (freelance), en la medida que los vayas cobrando podés ir facturando.
Escenario 3: una combinación de 1 y 2. Tenés un cliente al que le facturas mensualmente y tenés otros trabajos que los vas cobrando esporádicos y vas facturando en la medida que vas cobrando.
Escenario 4: cambiaste y emitiste una factura a principio de mes pero a fin de mes te surge un gasto inesperado y necesitás realizar otro cambio dentro del mismo mes, por lo que vas a emitir una segunda factura para esa transacción.